Tanto física como psíquicamente para el parto y nacimiento, ayudándoles a desarrollar sus respectivos roles parentales.
La frecuencia recomendada para un embarazo no complicado es: Cada 4 semanas durante las primeras 28 semanas , cada 2-3 semanas entre la semana 28 a la semana 36 y Semanalmente después de las 36 semanas.
Debe discutirse comportamiento saludable, cuidado dental, mantener ejercicios, evitar exposición a químicos peligrosos, mínimo uso de saunas o tinas calientes, uso correcto del cinturón de seguridad, cese de tabaquismo en pacientes fumadoras y evitar consumo de alcohol. En pacientes con cesárea previa, discutir riesgos y beneficios de trabajo de parto después de una cesárea versus repetir cesárea en forma electiva